El estancamiento doble en la estrategia del ejército sirio y las operaciones de bombardeos occidentales para frenar a los fundamentalistas del Estado Islámico y las docenas de frentes guerrilleros que combaten a Bashar Al Assad reflejan por un lado que las fuerzas gubernamentales sirias con ayuda de Irán no pueden retomar posiciones enemigas y por otro lado ,deja claro la inutilidad de los operativos estadounidenses contra el Estado Islámico en Siria.
Es en ese contexto ,que la masiva ola de refugiados hacia Europa , el pronunciado desgaste en las Fuerzas Armadas Sirias y el fracaso de los bombardeos contra el Estado Islámico por parte de Occidente obliga a una nueva aproximación en el abordaje de la guerra , que desde el punto de vista Ruso necesita concentrar esfuerzos contra los fundamentalistas en lugar de privilegiar el hasta ahora inútil derrocamiento de Al Assad.
Si bien no estaba claramente definido por Vladimir Putín el involucramiento militar masivo de Rusia en el conflicto, este nuevo panorama de los refugiados sirios en Europa, el lento, pero sostenido avance de las fuerzas anti Asad, el deterioro en la capacidad ofensiva del ejército sirio ,la posibilidad de una nueva repetición de las anarquías Libia e Iraquí en Oriente luego de los derrocamientos de Sadam Hussein y Muamar Kadafi y coronando con la decepcionante campaña de bombardeos de Estados Unidos y aliados,.impulsan nuevas maniobras Rusas para proteger intereses nodales.
Bashar Al Assad y Vladimir Putin
Favoreciendo el apoyo interno a una activa participación militar Rusa,cae como anillo al dedo, el ataque con morteros a la embajada de ese país en Siria y el efectivo proceso mediático llevado a cabo para explicar las consecuencias fatales para la única base naval Rusa en el área localizada en Tartus ,si las fuerzas gubernamentales son derrotadas en Siria .
Las adaptaciones aceleradas en la base Siria de Latakia para acomodar aviones cazas, bombarderos ,drones y helicóperos militares Rusos es clara señal que la escalada en la participación Rusa en el conflicto busca romper el estancamiento en el mismo, sea proporcionando más apoyo logístico al ejército Sirio o preparándose para actuar con fuerzas especiales bien entrenadas y equipadas en el teatro de operaciones.En mi opinión, la última opción es probable, debido a las reminiscencias amargas de la experiencia Rusa en Afganistán y a los altos costos operacionales de iniciar un masivo movimiento de soldados rusos hacia Siria.
La reunión a realizarse entre Obama y Putín en New York,tendrá este tema como telón de fondo, y el discurso de Vladimir Putin en las Naciones Unidas a finales de septiembre deberá ser un material de exposición y justificación de la nueva estrategia Rusa ,que continuará adelante aún sin acuerdo entre las superpotencias ,por lo cual,Rusia entrará en peligroso curso de colisión internacional con Estados Unidos y sus aliados, con repercusiones políticas,económicas y militares muy complejas ,difíciles de predecir.
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